La tecnología de conducción autónoma está pasando del diseño modular tradicional al diseño de extremo a extremo. El diseño modular incluye tres módulos principales: percepción, planificación de decisiones y control de ejecución, cada uno de los cuales puede optimizarse de forma independiente. Sin embargo, la transferencia de información entre módulos puede conllevar pérdidas y es difícil hacer frente a escenarios complejos.
El diseño de extremo a extremo genera instrucciones de control directamente a partir de datos de sensores sin procesar, eliminando los pasos intermedios. Mediante el entrenamiento con grandes cantidades de datos, puede aprender reglas de decisión más complejas y manejar mejor diversos escenarios. Sin embargo, los sistemas de extremo a extremo tienen una explicabilidad más pobre y es difícil localizar problemas.
Tesla FSD V12 adopta un diseño de extremo a extremo y ha logrado un progreso significativo en poco tiempo. Utiliza redes neuronales para generar instrucciones de control directamente a partir de entradas visuales, similar a la conducción humana. Este enfoque puede aprender estrategias de conducción más flexibles sin estar limitado por reglas predefinidas.
El diseño de extremo a extremo se considera la dirección futura de la conducción autónoma. Puede aprovechar plenamente las ventajas del aprendizaje profundo para lograr decisiones de conducción más inteligentes. Sin embargo, aún es necesario resolver problemas como la explicabilidad y la seguridad. Los futuros sistemas de conducción autónoma probablemente combinarán las ventajas del diseño modular y de extremo a extremo para lograr una conducción autónoma más confiable.
En general, el diseño de extremo a extremo ha traído nuevos avances a la conducción autónoma, pero aún necesita mejoras adicionales. La tecnología de conducción autónoma está en una etapa de rápido desarrollo y se espera que logre niveles más altos de autonomía en el futuro.