El superordenador más potente de la historia está a punto de debutar: ¿Llega una nueva era de la IA?

SingularityNET está desarrollando una supercomputadora de AGI, con el objetivo de ponerla en funcionamiento en 2025, y utilizará tecnología GPU de NVIDIA.

Se espera que un nuevo y potente superordenador entre en funcionamiento en septiembre, con el objetivo de acelerar el desarrollo de la inteligencia artificial a nivel humano. Este superordenador modular, construido por SingularityNET, forma una "red de computación cognitiva multinivel" diseñada para albergar y entrenar la arquitectura necesaria para la AGI (Inteligencia Artificial General).

El sistema incorporará componentes avanzados, incluyendo GPUs NVIDIA L40S, procesadores AMD Instinct y Genoa, racks de servidores Tenstorrent Wormhole con GPUs H200 y sistemas NVIDIA GB200 Blackwell. Su objetivo es permitir una transición de la IA basada en el aprendizaje de datos a gran escala y la simple reproducción de contextos a un pensamiento maquinal no imitativo más avanzado que implique algoritmos de razonamiento en múltiples pasos y modelado dinámico del mundo.

Las capacidades clave que el sistema pretende alcanzar incluyen:

  • Aprendizaje continuo: IA que puede aprender y actualizar conocimientos constantemente
  • Generalización perfecta: Aplicar el conocimiento aprendido a situaciones nuevas y no vistas
  • Automodificación reflexiva de la IA: IA que puede mejorar y ajustar autónomamente sus propios algoritmos y estructura

Se prevé que el primer superordenador comience a funcionar en septiembre, y se espera que el proyecto completo esté terminado a finales de 2024 o principios de 2025, dependiendo de los plazos de entrega de los proveedores.

El objetivo de SingularityNET es proporcionar acceso a datos para el desarrollo de la IA, la AGI y la futura superinteligencia artificial. La nueva infraestructura de hardware está construida específicamente para implementar OpenCog Hyperon, un marco de software de código abierto para la arquitectura de sistemas de IA, y su entorno de ecosistema AGI.

Para conceder a los usuarios acceso al superordenador, se utilizará un sistema de tokens común en la IA. Los usuarios podrán acceder y añadir datos a conjuntos de datos existentes en los que otros confían para probar y desplegar conceptos de AGI.

Aunque las estimaciones varían, algunos expertos predicen que los sistemas de IA podrían alcanzar o superar la inteligencia humana en 2027-2028. Esta nueva red de supercomputación representa un paso importante hacia el desarrollo de capacidades de inteligencia artificial más parecidas a las humanas.

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